
Según el último estudio de la Universidad de Chicago en San Diego, los países que más sufren a nivel económico el avance del cambio climático son, precisamente, los que más CO2 emiten. Una afirmación que da al traste con la teoría que situaba a los países desfavorecidos en esta poco deseada posición y que pone a los grandes contaminadores del planeta en una situación aún más comprometida.
India, Estados Unidos y Arabia Saudí son, por este orden, las potencias que están haciendo flaco favor al mundo en general y a ellas en particular. Su modelo económico alejado de la sostenibilidad pasa factura y los números lo demuestran.
Atendiendo a este estudio, India tendría pérdidas de 86 dólares por cada tonelada métrica de carbono emitida; Estados Unidos, 48 dólares y Arabia Saudí, unos 47 dólares. Un poco más alejados se situarían ya Brasil, China y Emiratos Árabes Unidos, con pérdidas que sobrepasan los 20 dólares por tonelada métrica en cada caso.
Para calcular el costo social del carbono- término acuñado por los asesores de Barack Obama para determinar los daños que las emisiones de CO2 tenían sobre la economía de sus habitantes-, los investigadores han utilizado varios estudios sobre la evolución del clima, el ciclo del carbono, el patrón geográfico del calentamiento global y las trayectorias de las emisiones de efecto invernadero, entre otros.
Mientras que el gobierno de Donald Trump y los demás mencionados guardan silencio, la sociedad estadounidense ya ha empezado a reclamar medidas para frenar el avance del cambio climático. Nada mejor que ver cómo nuestros actos afectan a nuestra cuenta corriente para que la conciencia medio ambiental se despierte. Aunque resulte difícil, cada vez más el daño ambiental se mide en números.
Los mismos que ahora han revelado que los datos que barajaba Trump para apoyar la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París no eran del todo correctos: si antes el costo global por tonelada se situaba entre los 12 y los 62 dólares, ahora lo hace entre los 180 y los 800.
Dosis de realidad en su peor versión que abogan por abordar la descarbonización como una vía imprescindible para frenar el avance del cambio climático. En Reciclamás te hemos hablado largo y tendido sobre ella, pero si hay alguna herramienta, mecanismo o proyecto para reducir la contaminación del que te gustaría saber más, ¡solo tienes que decirlo!
Fuente: Energías Renovables